Si eres de esos casos extraños de Cuarto Milenio, que te hablas con algún vecino, a poco que te fijes y no seas de los que no ven un Jaguar en su garaje te darás cuenta que tras el comentario de rigor sobre el frío o calor que hace, el siguiente comentario con mejores o peores palabras según el nivel de desnudez que posea el comentarista será algo parecido a: "nos han dejado en pelotas".
Literal, en pelotas nos tienen que haber dejado porque el otro día, con tan mala suerte, encendí el televisor y vi a la gente en verdaderas pelotas, uno paseaba el trípode por la arena con toda naturalidad y la otra remojaba el molusco bivalvo sin prisa ninguna por el mar pese a que había más de uno con una cámara bajo el agua enfocando con todo tipo de detalle la especie exótica.
Especie exótica no lo sé pero extraña un rato en la que nos estamos convirtiendo, así que por favor si la gente va a conocer a su amor para toda la vida y no tiene ropa que ponerse pido con toda humildad que Antonio el del bar les guarde un décimo de los premiados para que los que se han quedado en pelotas literalmente puedan conocer a sus futuros amores vestidos.
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